sábado, 2 de junio de 2012

Yo misma.

Siempre soñé con ser feliz, con encajar con todo el mundo, con vivir en un cuento de hadas. De pequeña leía cuentos de princesas, como toda niña, me los creía, pensé que algún día sería una princesa de cuento, conocida en todo el mundo. Como toda niña, tenía sueños surrealistas. Ahora ya tengo la suficiente edad de saber que estoy en un mundo de verdad, de que siempre seré esa niña tímida y pequeña que fui de cría. Siempre me pondré roja en los momentos incómodos, sonreiré en todo momento, daré la razón a aquellas personas que quieran entrar en discusión. Cantaré en silencio delante del espejo, escuchare contenta los consejos que me dan las personas. Maquillare a toda aquella persona que me deje. Escuchare con intriga cuentos de los ancianos. Reire con las personas que menos aprecio. Y siempre intentare llevarme bien con todas aquellas personas que pongan un poquito de su parte.